viernes, 25 de septiembre de 2020

 




Infierno

 

Disfraz en lo claro oculto en la danza

Descanso desvestir belleza,

Nuestra piel es nuestra.

Vida muerte vidas risas

Paredes orbe paredes melodías.

Blanco negro blanco fin,

Rosas de rosas sin grises:

 

Carta de amor

 

Mi tiempo espíritu alma ser ojos

Seguirán siendo en parte tuyos.

Dejaron todo en mí de vos

Para siempre

Esos años pasados:

No teniéndote te tengo.

Ir venir quedarse reunir

Esperar olvidar volver.

Decir.


lunes, 21 de septiembre de 2020

 




La versión de Magdalena





En su imaginación fueron uno, suspendido el tiempo en la paz de los breves espacios que se eternizan. Solo conservaba un par de fotografías y un borroso distante recuerdo. El vino y el fuego en el hogar en aquel campo a las afueras de Santa Rosa, la vigilia mezclada con la serenidad de la soledad sirvieron para detenerse en ella. La mayoría de las fotografías eran de fiestas y reuniones. Mediante dichas fotografías retuvo su mirada, se comunicó con la versión de Magdalena que le permitió el diálogo con sus formas definidas. Dentro de las formas encontró la forma, ella con muy poco maquillaje. Un almuerzo familiar de entorno en común. Aparece mirando la cámara fijamente, los ojos un poco más abiertos de lo habitual y media sonrisa. Esa fue la más bella de las varias caras de Magdalena. Ella sin antifaz, rescatada de la niebla que la alejó de los firmes abrazos en la más profunda estancia de lo desnudo.

lunes, 14 de septiembre de 2020

 





El jardín secreto




El viento que roza aquellos pinos desciende con  su canto sentido de solo bailar entre niñas risueñas que no entienden de algunos caprichos del destino. Fuertes redes tejidas en la complicidad de un silencio de colores que acompaña su hacedor el mundo. Una sonrisa de mujer que detiene el tiempo: la alegría y la seriedad conviven en la mirada sostenida de la que fue y vino de sus límites. La sencilla entrada espera a los viajeros dispuestos a la magia que encanta los sentidos. Ya todo atenta, como la dulce conspiración de una suave trompeta que siempre estuvo ahí. En el silencio de la noche una corriente hipnótica nos lleva a su puerta donde espera el espejo más fiel y definitivo.         

martes, 1 de septiembre de 2020

 




Las dulces guitarras

 




Me cierran los ojos cuando retengo tu mirada. Te beso

Impulsado por sus voces que invitan a dejarme llevar

En la quietud armónica del mundo de noche.

Mi piel se funde con el dulzor distante de la tuya

En la profunda complicidad de sus compartidos 

Claros símbolos: irrumpen en mi cuando cedo algo mío.

Despierta como quien abraza el viento que juega en pasillos.

 

Me cierran los ojos con sus formas. Las dulces guitarras

Aparecen y se mueven cómodas en las ruinas calmas

De los perdidos amoríos. Suaves van con la muerte del abismo

hacia el alivio de tus ojos, trazados por los muchos nombres,

Descansando apacibles en silencio en los míos,

Me sumen en la esperada música que sólo dos abrazan:

Despierta como quien abraza el viento que juega en pasillos.


  Lo inasible     Cuando se encontró de rodillas, maltratado injustamente en esa blanquecina habitación a las afueras de La Plata, ent...